Hogar del legendario escritor Honoré de Balzac

Hotel Balzac: el origen

La historia del lujoso Hotel Balzac parece extraída de una novela. A principios del siglo XIX, el banquero francés Nicolas Beaujon encargó al arquitecto Nicolas-Claude Girardin la creación de un “palacete” para su disfrute en la inmensa propiedad anexa a su residencia principal. El resultado fue un palacio de recreo construido en la intersección de las actuales Rue Beaujon y Rue Balzac conocido como “La Folie Beaujon”.

Este palacete fue calificado por sus contemporáneos como extraordinario y construido en un estilo exótico con un gran pabellón central que unía cuatro apartamentos anexos.

Tras la muerte de Nicolas Beaujon, esta famosa edificación evolucionó y cambió de manos varias veces hasta convertirse en la sede de un “salón” para epicúreos y amantes del champán. Fue entonces cuando el legendario escritor francés se quedó prendado de la propiedad...

El espíritu de Honoré de Balzac

Considerado como uno de los fundadores del realismo, Honoré de Balzac fue un destacado novelista, dramaturgo y autor de relatos breves, especialmente famoso por sus obras colectivas que componen La comedia humana, una visión panorámica de la vida francesa entre la Restauración y la Monarquía de Julio (1815-1848).

Tras una infancia dominada por la enfermedad y bastante deprimente, Balzac llegó a París con su familia y pasó dos años en un internado privado antes de empezar a estudiar en La Sorbona, donde fue alumno del futuro Primer Ministro François Guizot, el clasicista Abel-François Villemain y Victor Cousin, el famoso filósofo. Al finalizar sus estudios, el futuro escritor trabajó tres años como pasante antes de anunciar su intención de convertirse en escritor.

Durante los siguientes diez años, Balzac perfeccionó su destreza como escritor. Aunque algunos de sus escritos presentan leves características distintivas de sus futuras obras, esta fue una fase de aprendizaje. Escribió, sobre todo, usando pseudónimos y creó historias extrañas, novelas baratas y obras mediocres aunque interesantes.

Poco después de empezar a publicar bajo su verdadero nombre, a Balzac se le ocurrió la idea que dio lugar a su obra maestra, La comedia humana, y durante los siguientes 20 años, sus novelas, obras y relatos breves publicados por separado esbozaron un complejo retrato de la sociedad francesa y, finalmente, fueron recopilados en una extensa obra maestra.

A lo largo de los años su escritura influyó a una interminable lista de novelistas que incluía a Marcel Proust, Émile Zola, Charles Dickens, Gustave Flaubert, Marie Corelli, Henry James, Jack Kerouac e Italo Calvino, además de importantes filósofos como Friedrich Engels.

Hacia el final de su carrera fue cuando Honoré de Balzac quedó hechizado por el futuro hotel y, en 1846, compró la propiedad como regalo para la condesa Ewelina Hanska, con quien se casó en mayo de 1850. Pasó sus últimos días en la casa y murió sin haber abonado el precio de compra.

El espíritu de Balzac sigue vivo en el lujoso hotel, donde pueden encontrarse colecciones de libros antiguos y litografías que muestran al escritor, así como escenas de su obra.